Pocas veces me he sentido volar como el día de hoy,
simplemente dejándome llevar por la brisa sureña
y los acentos del norte que cruzaron frente a mi camino,
sé que entre más discuto menos me entiendo,
sé que dejo simplemente hacer al viento,
yo doy los pasos disfrutando del paisaje,
admirando los colores, las sonrisas y los encuentros,
el destino se encarga de mover a quien ya no corresponde
y de colocarme cara a cara con lo que grita mi nombre...
Regreso entonces a casa después de un encuentro con el pasado
y estas palabras reflejan lo que el corazón quiso expresar con aroma a locura caprichosa:
"A veces nos quedamos pegados en algo que se sabe que es irrepetible y eso nos hace mantenernos en relaciones insanas... Es una cagada, a veces es mejor simplemente pasar la hoja"
y así va soltándose un recuerdo mágico,
va acallándose un lamento nostálgico,
en medio de lágrimas dulces y risas completas,
abrazos de familia antigua muerta,
despedidas sin promesas de vuelta,
caminos que se distancian impulsados por distintas cometas...
Hay nuevos aires en el horizonte,
renacimientos del corazón que venía latiendo,
reencuentros con terceros
y una pregunta indiscreta:
¿será así el estar completa?
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