jueves, noviembre 01, 2012

Una noche, cuatro escenarios... la misma locura

En diferentes lugares del bosque, cuatro brujas que han aprendido a extender sus alas a punta de golpes, se encuentran y comparten una duda... ¿será que fuimos demasiado duras? Desde el otro extremo del camino, un duende que tiene muy claro su destino, les recuerda que no deben ocultar su corazón ante la inseguridad de quienes se han cruzado a lo largo del trayecto, pues si ellos no soportan la presión de dar la cara y ser sinceros, si no pueden manejar la verdad de frente y se ocultan en el silencio, quizás no son quienes deberían compartir un vuelo, pero.... también las llama a no ser inflexibles y dar espacio a que el tiempo desnude los sueños.



"¿Cuántos días debería esperarse una respuesta explícita?" -- pregunta la bruja verde norteña -- "El silencio es también una respuesta" -- comenta uno de los lobos que se acerca al círculo nocturno a la hora de la cena.

"¿Debería guiarme por lo que me dice su mirada más allá de las palabras?" -- cuestiona la bruja azul turquesa -- "No perdás las esperanzas, pero continuá avanzando por la vida sin esperar nada a cambio por la paciencia" -- responde un hada cercana al motivo de la angustia pasajera.

"¿Cómo podría reaccionar ante el encuentro sorpresa que las estrellas vaticinan para estos días de primavera? -- consulta la bruja violeta que se mueve del norte al sur siguiendo una vieja promesa -- "Tratá a como te gustaría ser tratada, bajá tu orgullo de niña mala, expresá lo que tu corazón resguarda, dejá de ser la princesa de hielo que mata con la mirada y disfrutá del juego que los dioses te regalan" -- grita desde una esquina el sauce sanador que ha estado esperando esta oportunidad para ver renacer al hada mágica.

"¿Suelto lo que me amarra o espero a que me devuelva las ganas?" -- duda la bruja rojiza sureña -- "Soltá lo que te causa angustia, lo que no te ayuda a construir tus sueños, lo que ya sabés que no calza con tu despertar interno. Soltá porque él no va a colaborar en la obtención de tu libertad" -- aclara un fauno maestro al conocer la naturaleza de la realidad.

Al final de la noche, entre una palabra, un reproche, mil silencios, muchas preguntas intergénero y un poco de humor, llegan a una conclusión... no es la ausencia lo doliente, sino el no recibir una respuesta decente. Los acompañantes mágicos de estas brujas saben, en el fondo del corazón, que una palabra puede abrir caminos o cerrar destinos, todo depende del momento de expresión...


3 comentarios:

  1. Ay versera hasta q por fin me dejo comentarte!!

    Bruja no tengo palabras ante la impresion y verguenza que siento de nosotros los varones, pero no olvides que una cosa es ser un hombre y otra ser un mago... Mientras llego a casa y puedo abrazarte te dejo esto :(

    La impotencia que sienten mis manos
    cuando no puedo secarte las lagrimas
    y aminorar tu dolor,
    solo se compara con el enojo
    que me mueve a cruzar mar y tierra
    para acabar con lo que te produce este horror...

    Besitos y no olvides las lecciones,
    que entre mas versera vos,
    menos daño al corazon! :*

    ResponderEliminar
  2. Sí nene, pero esperaba que al menos, después de compartir tantas cosas conmigo, fuera hombre... aunque no mago! ... No sé, que algo hubiera aprendido! ... Pero suelto!

    ResponderEliminar
  3. Nena hermosa... quien no lo logra por si mismo no lo aprende en cabeza ajena... por mas q vivan juntos 100 años, la historia ya lo ha demostrado!
    Lección? Magos y brujas con magos y brujas y muggles con muggles... por algo existe la frase: no desperdiciar perlas en chanchos!! ;)

    Te extraño!! :(

    ResponderEliminar

Cuando soñamos las cosas parecen más reales...

el sueño nos conecta con nuestro mundo interno